VENDEDORES DE HUMO
El Museo del Arte No Visible de Nueva York (MONA) es una extravagancia conceptual más, donde se exhiben obras de arte invisibles y se venden a precios astronómicos. Eso sí, no faltan tarjetas colocadas en las paredes donde se persuade a los tarugos de las excelencias de las "obras de arte" que allí (es un decir) se pueden contemplar.
No resulta difícil establecer una comparación entre esta estafa disfrazada de arte contemporáneo y la política posmoderna, en la que los poderosos sin escrúpulos crean amenazas-fantasma y con la ayuda de sus sicarios "periodistas" siembran el pánico y la histeria entre la gente, hasta el punto de generar una crisis de alucinación colectiva. De esta forma, ofreciéndose como los defensores del pueblo y sus protectores frente a un peligro inexistente, los estados establecen un férreo control sobre la ciudadanía y hacen lo que les da la gana con sus subordinados, vendiéndoles la moto de que todo lo hacen por su bien.
¿Y qué es el derecho al voto sino una alucinación colectiva para hacer creer a la plebe que se cuenta con ella y que puede cambiar algo?
¿Será que nuestros políticos y "agentes de la comunicación" se han convertido en los más acreditados artistas conceptuales?
No hay comentarios:
Publicar un comentario