LA COSA SE PONE CALENTITA
Todo apunta a que la primavera va a estar caldeada, y no precisamente por culpa del "calentamiento global" de la Greta Zumber. Han empezado los camioneros de la "ultra derecha" a tomar las calles. Y seguirán otros muchos. Los que hasta ahora se sentían muy cómodos con la dictadura globalista, empiezan a tener problemas para llenar la despensa. Se esperan más movilizaciones al margen de los sindicatos cómplices, y mucha tensión social, como ya preveían las aseguradoras. Tal vez nuestro narco capo favorito Ñoño Frijol se esté frotando las manos en este preciso momento, soñando con ser el próximo representante del Foro Económico Mundial en España, si sus amos turbocapitalistas consideran que su fiel y lacayuno Perro Sánchez es en esta coyuntura del todo prescindible, y deciden dejarlo caer. O tal vez consigan mantenerlo en la poltrona unos meses más, dándole más fondos que le permitan profundizar en su proyecto de dictadura china y sorosiana en Expaña. Igual se le ocurre confinarnos a todos una vez más para Semana Santa, coincidiendo con una nueva variante del virus del murciélago. Pero me da la impresión de que va a encontrar a la plebe mucho menos colaboradora esta vez, y con menos ganas de aplaudir desde los balcones a las ocho de la tarde.
Seguiremos informando desde este lado de la trinchera, amigos.
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