lunes, 3 de marzo de 2025

 FANTASÍA WAGNERIANA


Nos complace presentar un nuevo vídeo del canal de YouTube de Dagga Ramba. Esta vez se trata de un ensayo, algo rudimentario lo reconozco, de una película de animación, empleando unas herramientas tan sencillas como las que proporciona Google: el programa Paint 3D y el Microsoft Clipchamp. Parece mentira la cantidad de dibujos que hay que hacer para apenas tres minutos de animación. He intentado sacarle el mayor partido posible al ritmo y temporalización de los frames y al juego de las transiciones para lograr ciertos efectos cinéticos.
Espero que los muy wagnerianos no se sientan ofendidos por mi osadía al utilizar una partitura del genial Richard Wagner para hacer esta clase de experimento. Si no alcanza el nivel satisfactorio que hubiera sido de desear no ha sido, desde luego, por culpa del acompañamiento musical, que no podía haber sido mejor, tratándose nada menos que del preludio del acto III del Lohengrin, dirigido por la sabia batuta del eximio Herbert von Karajan. 
Las escenas, inspiradas muy libremente por esa música, se enmarcan en el género de la fantasía heroica, tan afín a las óperas wagnerianas, aunque sin entrar en cuestiones de carácter morrocotudo como el mito del Grial, que hubiera sido muy vano por mi parte haberlo incluido aquí también.
Espero que el público seguidor sea indulgentes con esta enésima trapacería de un humilde amanuense gráfico.



 CARNAVAL CANÍBAL

Dibujo de Francisco Ibáñez


No sé por qué será, pero la llegada del festivo carnaval siempre me ha traído a la cabeza la inminencia de algo terrible, como si compartiera de algún modo las aprensiones y el espantoso trauma del pintor Gutiérrez Solana. Quizás sea porque muy a menudo y de un modo inexorable, acostumbro a contraer por estas fechas en las que el tiempo es más falso que Perro Cáncer, algún catarro o síntoma gripal, y esta vez se me ha agarrado uno especialmente contumaz en la garganta que me la ha dejado hecha polvo, apagando con dramatismo el sonido de mis cuerdas vocales. Espero que se trate de un episodio temporal, que pueda resolverse en breve mediante la administración de generosas dosis de miel con limón, porque no me gustaría acabar el resto de mis días hablando con voz castrati de falsete. 
Otro motivo por el que el tan popular y aparentemente transgresor carnaval me parece una castaña insufrible, es que produce no poca vergüenza ajena el ver a tanta gente adulta haciendo el gilipollas, con la que está cayendo, yendo disfrazada por la calle de Super Mario Bros o de la muñeca Barbie. Además, el carnaval moderno y urbanita, que poco tiene que ver con los brutales entruejos de nuestros antepasados, con su salvajismo rural y en los que había carta blanca para dar rienda suelta a los más bajos instintos, está desde hace unos cuantos años demasiado teñido por los colores del arcoíris, a la vez que por lo necrófilo. Valga decir que al igual que buena parte de los eventos del calendario festivo/reivindicativo contemporáneo. A veces no hay manera de distinguir si nos encontramos ante una chirigota de carnaval, la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos, la gala de los Goya, la carroza del día del orgullo guay, las comparsas del jalogüín o las almas en pena del chocho-eme; todo  tiene el mismo aire entre lo festivo y lo macabro.
Esta debe ser la razón de por qué se fomenta tanto desde los centros educativos y los institutos de secundaria que los alumnos y profesores acudan disfrazados de payasos a las aulas; aparte de promover la infantilización cretinizante a todos los niveles, se trata de implementar una agenda muy concreta.
Para algunos la etimología  de la palabra "carnaval" procede del "carro naval" o Nave de Isis de alguna antigua celebración romana. Para otros es el "carne vale" o "adiós a la carne" que precede a la cuaresma. Las sectas evangélicas prefieren la interpretación, sacada de la manga como es su  costumbre,  de "carne para Baal", sacrificios para la deidad sanguinaria de los cananeos (que con ligeros matices era la misma que la de los israelitas, por cierto).
A mí siempre me ha sonado más la cosa a "caníbal", siendo curioso además que el carnaval goza de mucha popularidad entre los afrodescendientes y otros grupos afines. Y tal vez a la dieta antropófaga estemos avocados en un futuro no muy lejano, para complementar nuestras raciones alimenticias de insectos y de larvas aprobadas por las autoridades sanitarias de la Unión Europea.