viernes, 18 de octubre de 2019


APOCALIPSIS CATALÁN

Fotograma de la película "World War Z"
Al final ha pasado lo que tenía que pasar. Las famosas y revolucionarias sonrisas se han revelado como las sonrisas de las hienas o los tiranosaurios. Y el colapso y el caos se han precipitado sobre Barcelona, Catar-luña y desde allí, como una metástasis, amenaza con expandirse por todo el resto de la piel de toro. 
El Pingüino Torra (cuya catadura es más propia de un villano de tebeo que del  representante de una supuesta raza superior) se ha apoderado de Gotham y , con el permiso del pusilánime Pedro Sánchez, ha lanzado a sus huestes de pingúinitos radicales a incendiar las calles de la ciutat condal. Esos pijos y niñatos malcriados, dignos retoños de una burguesía podrida y consentida, y de una sociedad mimada e infantilizada como la catalana, pretende recrear ahora con el tsunami democràtic  su particular "noche de las bestias", es decir interpretar a lo vivo una película de zombis, llevándose por delante todo lo que pueda ser arrasado a su paso. Con un poco de suerte, esta "gent de pau" le plantará fuego a la Sagrada Familia, al Liceu, al Palau de la Generalitat, al Camp Nou, etc. destruyendo así la principal y casi única industria que les quedaba a estos imbéciles, la industria del turismo. Enhorabuena, meus maulets.
El que siembra vientos recoge tempestades, dice el refrán español; y no sería la primera vez que a la burguesía catalana se le escapa de las manos  y se les descontrola el monstruo de Frankenstein que ellos mismos han amamantado... con la inestimable colaboración de los sucesivos gobiernos de España. Recordemos la Semana Trágica de 1909, el fallido golpe del 34 o la siniestra presidencia de Luís Companys. Barcelona ha sido numerosas veces en el pasado pasto de las llamas, igual esta vez va la vencida.

viernes, 4 de octubre de 2019

EL FLEQUILLO HITLERIANO DE PABLO

Autorretrato de Picasso (1907)

Tras ver la serie yanki de National Geographic "Genius Picasso", tras el mareo que producen los continuos flash backs y el tejido caleidoscópico y cubista del argumento, uno acaba por descubrir un biopic más del montón sobre la vida de un artista, aderezado con los tributos de rigor a la corrección política que imponen los tiempos que vivimos. Lo que obliga a poner al reconocido mujeriego "en su sitio" y a  sacar a relucir sus trapos sucios y sus sombras, el carácter egocéntrico del personaje, sus infidelidades varias, por supuesto el consabido "sadismo" y lo que hacía sufrir a sus "compañeras sentimentales", etc.  De tal forma llega a desplazarse en un determinado momento de la serie el protagonismo  hacia sus "víctimas" femeninas, olvidándose casi  por completo del  Picasso  artista y de su obra pictórica, que el bodrio podría haberse titulado con más propiedad "las mujeres de Picasso".