martes, 29 de abril de 2025

OTRA JORNADA DE CAOS


Pocos días después del deceso de Jorge Mario Bergoglio, y del punto final del pontificado woke del supuesto Pedro el Romano de la profecía de San Malaquías; y antes de que el cónclave reunido en el Vaticano elija al vaticinado Papa Negro de Nostradamus, hemos asistido a una especie de mini-apocalipsis en forma de ensayo ibérico del Gran Apagón. Que estas cosas también vienen siendo profetizadas por los grandes vates modernos, como el magnate aspergeriano Elon Musk  o por Klaus Schwab y otros ilustres próceres del Foro de Davos. Por cierto, que el sapo Schwab ha aprovechado que la atención mediática está concentrada en el sepelio del pontífice woke para cederle los trastos a otro personaje que parece sacado del casting de malos de una película de James Bond...
Una vez más un país con gente con muy pocas luces como  el nuestro, ha sido escogido como el campo de pruebas favorito de la élite globalista para hacer un experimento sociológico/psicológico como el del 2020 o el de la "Dana", del que sin duda "saldremos todos más fuertes y resilientes". Sólo faltó que Pedro Fánguez dijera aquello de "quien quiera luz que la pida".
Y otra vez este tipo de cosas nos dejan la impresión de que nuestros supuestos gobernantes, tan holgazanes e irresponsables como los grupos de la oposición, no son los que en realidad manejan el cotarro, no son los que están al mando y se conforman tan sólo con recibir órdenes de "superiores desconocidos", como corresponde a los representantes de un estado títere y vasallo. Que no nos vendan más la moto de que España tiene soberanía, porque hace mucho que la vendió por un plato de lentejas a los USA y a la UE, y por tanto es poco probable que seamos el blanco de ciberataques o sabotajes de una potencia extranjera (aunque si fuera así antes que a Rusia habría que señalar a Estados Unidos o a Israel). Más bien todo lo que nos está pasando obedece a un estudiado plan que nuestros gobernantes se limitan a cumplir y a acatar con gran aplicación. 
Sin embargo aquí nada importa demasiado. Como decía la canción, todo es fetén y nada se discute porque todo va dabuten. Porque al final se echará la culpa de lo sucedido a los hackers rusos o al cambio climático. Y todo este caos servirá a la postre para los propósitos de los amos: más gasto en defensa a base de recortes sociales o de nuevos impuestos (como aconseja el líder de la UGT) o para avanzar un poco más en la agenda climática.


 

viernes, 25 de abril de 2025

 

LA IA QUE NO CESA

Cuando apareció la fotografía a mediados del siglo XIX, irrumpió con una fuerza tal que amenazó con trastocar todo lo que se había entendido hasta entonces como el arte, la forma principal en que los humanos somos capaces de interpretar y de dar forma al mundo. Se pensaba que ya no iban a ser necesarios los pintores de retratos, por ejemplo, porque la fotografía era capaz de obtener un facsímil del original por medios más rápidos y económicos. La lente, desde luego, llegó a cambiar el modo en que la gente percibía las cosas, y ahí están los trabajos de Muybridge para demostrarnos que los pintores de caballos de carreras se habían equivocado siempre hasta entonces a la hora de representar el movimiento de las patas de los equinos cuando estos se lanzaban al galope.
La fotografía no se convirtió con el tiempo en una enemiga de la pintura (aunque quizás sí de la mala pintura) sino más bien en una aliada, en una herramienta que ayudaba a comprender mejor el mundo, de una manera más precisa. Y no impidió, sino que más bien estimuló la búsqueda de nuevos territorios para ejercitar la creatividad; así aparecieron nuevas corrientes en el arte como el impresionismo o el simbolismo, que en su origen no tenían nada de fotográficas, y que sin embargo llegaron a influir más tarde en el estilo de algunos practicantes de la fotografía artística.

Hoy es la Inteligencia Artificial la que está provocando en el siglo XXI una revolución parecida a la que supuso en su momento la fotografía, pero posiblemente con efectos mucho más devastadores a corto o medio plazo. Aunque la cosa está por ahora en pañales y todavía sea prematuro hacer esa clase de afirmaciones, muchos intentan convencernos (en especial los adalides del transhumanismo) que lo que hace un ser humano lo puede hacer mucho mejor una máquina que trabaje con IA. Y como conclusión, dicen que los artistas llegarán a desaparecer porque en un futuro próximo los programas informáticos serán capaces de realizar muy fácilmente exquisitas creaciones artísticas que serán indistinguibles de las consideradas antaño como obras maestras. De hecho ya hace algún tiempo que uno de estos programas "trabaja" como Rembrandt, y otro se ha atrevido recientemente a recrear un cuadro perdido de  Diego Velázquez.

El otro día un chisme de esos me hizo un retrato artificial, a partir de una fotografía tomada ad hoc, representándome como un personaje de la Odisea. Es un alivio que no saliera parecido a Polifemo, sino más bien hecho un Adonis. Pero aunque agradezco el cumplido, sinceramente no consigo reconocerme del todo en el resultado final. Eso sí, sólo tardó unos cinco minutos en parir la caricatura. El estilo me recuerda un poco al de esos cómics modernos de la Marvel que son todos iguales (qué diferencia con los clásicos de Jack Kirby, Steve Ditko, Romita o Buscema) incluso en el tratamiento informático del color. Me imagino que tendrá una base de datos que utilizará como recursos diseños preexistentes y creados por los que se dedican a hacer esta clase de cómics.

Asisto con cierta preocupación a la proliferación en los últimos años de dibujantes más bien mediocres, que con un estilo muy estereotipado y despersonalizado reproducen los clichés de los cómics de superhéroes o del manga, creando al por mayor páginas y páginas que es posible que una IA pudiera hacer a la perfección, sin que nos diéramos cuenta del cambiazo. Es como si las editoriales estuvieran preparando el terreno, la transición a esa nueva realidad, que para ellas sería muy ventajosa, porque se ahorrarían tener que pagarle el sueldo a los dibujantes humanos asalariados. Si el público sigue tragando, sin duda este escenario llegará a imponerse muy pronto algún día; lo mismo que las películas o los programas de televisión protagonizados por actores virtuales.

En cualquier caso, no creo que la culpa de esta tendencia la tenga del todo la IA, ya que en gran medida se ve favorecida por la comodidad de los autores que se avienen a repetir esos clichés y a la voracidad de las empresas (editoriales o productoras de cine en este caso) que sólo se preocupan de su margen de beneficios y de abaratar los costes de producción.

viernes, 18 de abril de 2025

 

"El ahorcamiento de Judas" por Giovanni Canavesio (1491)

TRAICIÓN DE SEMANA SANTA

Una vez más la Iglesia (entendiendo por tal a la jerarquía eclesiástica: el Vaticano y la conferencia episcopal) han vuelto a asestar una puñalada por la espalda a los fieles católicos que todavía puedan quedar en España, faltando muy poco para que se dispongan a darles la puntilla final y arrojarles a los leones del circo progre. Así llevamos hace más de sesenta años, desde que con el famoso Concilio number two se pasó de bendecir la Santa Cruzada a dar amparo a etarras y a comunistas en sus filas, A La Mayor Gloria De Dios, amén de dar el plácet a la ley del aborto a cambio de recibir una jugosa financiación del IRPF. Y luego se extrañan esos sepulcros blanqueados de que cunda la apostasía en nuestro país; más debería de cundir con semejantes pastores al frente de su rebaño.

martes, 1 de abril de 2025



EL SENTIDO DE LA CABALLERÍA

"La caballería, teniendo por el ideal al héroe antes que al santo y al vencedor antes que al mártir; para quien todos los valores se resumían en la fidelidad y el honor, más que en la  caridad y el amor; viendo en la dejadez y la vergüenza males mayores que el "pecado"; poco inclinado a no resistir al mal y a devolver bien por mal, sino más bien habituada a castigar la injusticia y devolver mal por mal; excluyendo de sus filas a aquellos que mantuvieran el principio cristiano "no matarás", teniendo por principio no amar al enemigo sino combatirlo y no mostrar magnanimidad con él sino tras haberlo vencido. En todo esto la Caballería afirma, casi sin alteración, una ética heroico-pagana y aria en el seno de un mundo que tenía de católico sólo el nombre."

Julius Evola, "Espiritualidad pagana en la Edad Media católica".