martes, 7 de enero de 2020

FELICES AÑOS LOCOS

Detalle de "La gran ciudad" por Otto Dix (1928)
Empezamos bien el año (para estrenar  década habrá que esperar en realidad un año más) con toda suerte de malandrines perpetrando sus alevosas maquinaciones,ocultándose tras los destellos de las luces navideñas. Estas fiestas del solsticio de invierno o de los reyes magos multiculturales, o como se quieran llamar ahora, nos han traído algunos regalitos tan emponzoñados como la investidura de un indigno felón, dispuesto a descoser las costuras del Estado con tal de seguir disfrutando de las prevendas inherentes a su cargo, o la resolución del Parlamento europeo con la que nuestros "socios comunitarios" siguen premiando a los golpistas de la Generalitat, fieles servidores de los designios de sus amos globalistas.
Otro obsequio, esta vez en forma de dron, es el que ha recibido el general Soleimani del Rey de los Estados Unidos de América, tal vez para castigarle por haberse distinguido combatiendo el terrorismo wahabita que los saudíes, yankis y sionistas han estado patrocinando con tanta largueza. Tras este ataque terrorista, un desmelenado Donald Trump acaba de anunciar que no dudará en atacar hasta 52 objetivos culturales en suelo iraní, si alguien intenta vengar la muerte de Soleimani. Así se las gasta el gran amo gringo, añadiendo al asesinato selectivo la amenaza de nuevas atrocidades y crímenes de guerra. La cosa promete...